Se fabrican en una amplia gama de diámetros, desde ½ pulgada hasta 48 pulgadas, y pueden operar con presiones nominales de hasta 150 bares, adaptándose a distintas aplicaciones en acueductos, sistemas industriales, sistemas de agua potable. Gracias a su diseño y automatización, estas válvulas ofrecen un control preciso y eficiente, mejorando la seguridad y estabilidad de los sistemas hidráulicos.
Trabajamos con Bermad y Mankenberg, dos marcas de reconocida trayectoria y calidad en el mercado de válvulas de control. Sus soluciones innovadoras garantizan un rendimiento óptimo, confiabilidad y eficiencia en diversas aplicaciones hidráulicas.